laguna san rafael

Científicos participan como guías en exploraciones turísticas en Región de Aysén

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Si usted navegara en kayak por la laguna San Rafael y un investigador le explicara los detalles de sus hielos milenarios, estaría aprendiendo glaciología. Si participara en una colecta de insectos acuáticos, estaría realizando entomología. Es decir, con estas actividades podría estar efectuando ciencia. Y no sólo ciencia, también turismo, pero del científico.

Esta disciplina que, como su nombre indica, mezcla las ciencias y el turismo tiene distintas modalidades (ver recuadro). Una de ellas tiene como objetivo que las personas disfruten y aprendan de la zona que están explorando.

Desde hace dos años, la Región de Aysén está impulsando este tipo de actividad a través de la alianza que mantiene el Centro de Turismo Científico de la Patagonia y ExploraAysén, la sociedad de operadores que administra el turismo científico en la zona.

Los turistas son acompañados por un científico que les enseña sobre el lugar. Son actividades que calzan con el «turista que anda buscando alguna actividad», dice Sergio Fuentealba, gerente de ExploraAysén, quien agrega que «la idea es que no sólo sea un relato científico, sino que los participantes se sientan parte».

El científico

El río Simpson cruza la reserva nacional que lleva igual nombre y alberga centenares de especies de insectos.
Cada martes, jueves y sábado, el turista se transforma en entomólogo y, acompañado de un especialista, tiene la oportunidad de participar en muestreos, de tomar insectos y estudiar su rol en el ecosistema. Esta actividad cuesta $ 55.000 y dura siete horas.

En la laguna San Rafael el turista puede aprender de geología, glaciología, biología e historia. El programa comienza y finaliza en Puerto Tranquilo. La expedición se interna por el valle Exploradores y sigue la historia de los antiguos habitantes pehuenches. Luego se llega a la Bahía Exploradores, donde en un zodiac se recorren los glaciares de la laguna, siempre acompañado del avistamiento de flora y fauna. «El contenido de interpretación es mucho más potente que el normal de la operación de Entrex (el operador encargado). Conjuntamente a los seis u ocho clientes va un especialista que entrega muchísima más información, interpreta mucho más el medioambiente para los clientes, le da mucho más valor agregado al viaje», explica Sergio Fuentealba. La exploración a San Rafael vale $ 325.000 y dura dos días y medio.

Otro panorama organizado por ExploraAysén es una exploración a la Reserva Nacional Coyhaique, donde los protagonistas son los bosques nativos, destacando las plantaciones de pino y el bosque de lenga. En este plan, el turista hace restauración ambiental, aprende manejo de bosques y conservación genética de especies. Además, revisa distintos hitos forestales y de investigación. Cuesta $ 38.500 y se extiende por ocho horas.

Posteado en: http://www.latercera.cl

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